En el 2002, en Austin Texas, se creó el festival de música Austin City Limits. Uno de los festivales de música más grandes en Estados Unidos y del mundo que se encarga de presentar la vanguardia musical de los últimos quince años en diferentes géneros: indie, pop, hip hop, jazz, blues, soul y electrónica. El festival se caracteriza por presentar bandas experimentales de las escenas musicales de Los Ángeles, New York, Detroit, sureste americano, Reino Unido y Latinoamérica. También presenta un Line up de las bandas más reconocidas en la escena. En total son 130 bandas que tocan durante tres días seguidos y durante dos fines de semanas consecutivos en el Zinker Park, un majestuoso parque al lado del rio Colorado que tiene como fondo el dowtown de Austin. Rockombia estuvo por segunda vez en Austin City Limits, y a continuación presentamos las cuatro novedades del festival y las cuatro grandes presentaciones del evento.
Esta es la era de Benjamin Booker.
Cuando creíamos que Jack White ya lo había hecho todo, que el blues y el rock no podían llegar aún más alto, surge Benjamin Booker. Nacionalidad: El blues. Sexo: Fender Stratocaster. Si usted se quedó prendido por siempre a White Stripes, cuando digo prendido, me refiero a que usted considera que no se podía avanzar más allá de White Stripes, Benjamin Booker es la guitarra que vuelve a inventarlo todo de nuevo. Parece el hermano de Leny Kravitz pero no lo es. Parece el nieto de Jimmy Hendrix, pero tampoco lo es. En algún lugar del mundo, Jack White lo tiene que estar escuchando y debe estar diciendo: “ ¡Benjamin, pero qué has hecho con la música de White Stripes!”. Durante el concierto, Benjamin Booker estuvo a punto de romper la guitarra con la canción Violent Shiver, pero no lo hizo porque Jimmy Hendrix le dijo que no lo hiciera.
Debemos convertirnos a de Cult
Madelin Follin, cantante de Cult, entregó en el concierto toda la tristeza gótica que hay en su alma. Sin lugar a dudas, el electro rock pop de Cult llevó al público a una oscuridad matizada, una mezcla de alegría y tristeza que nunca termina por definirse, y uno con la música de Cult siente que quiere saltar y bailar pero a la vez deprimirse. Cult tiene un sonido post punk perdido en oscuras influencias de Joy Division, Talking Head y The Cure. Por esta oscuridad, la banda fue convocada para ser parte del soundtrack de la película Carrie (2013) del famoso libro de terror de Stephen King.
El indie pop barroco de St. Vincent
St. Vincent presentó un extraño experimento indie de ensamblaje de rock, jazz, electrónica, por momento con secuencias progresivas e industriales. La banda nos recuerda mucho a The Cardigans pero revolucionada hacia una densidad electrónica y a veces sinfónica. St. Vincent es de Dallas Texas. Annie Clark, la cantante y líder de la banda, estuvo vestida con un traje lleno de monstruos de otro mundo, sin duda fue una de las mejores presentaciones del festival. Verla en vivo es impresionante, ella se mueve como un robot. No parece de este mundo. Es una ciborg-mujer que hace indie pop barroco.
La reinvención post-psicodélica de Temples
De los proyectos extraños de revival que se hayan presentado últimamente, estos chicos de Londres llamados “Temples” están haciendo algo muy original. Ellos toman el rock psicodélico más crudo, más ácido, más trip trip trip de los sesentas para reinventarlo con un sonido contemporáneo. El resultado: escuchar el Pink Floyd de Syd Barrett, el rock The Byrds y The Kinks pero en clave actual. Estos chicos están haciendo un proyecto de ir directamente al corazón de la psicodelia inglesa de los sesenta para mostrar nuevos caminos de revival, reinterpretar influencias y empujarlas hacia un post-psicodélico siglo veintiuno.
El recuentro del pre-grunge con The Replacements
Cuando Kurt Cobain se suicidó en 1994 dejó una carta de despedida en la que aparecía esta frase de Neil Young “es mejor quemarse que apagarse lentamente” inmediatamente después de que todos sus seguidores leímos esto, nos fuimos a buscar la música de Neil Young y declaráramos al unísono: “Si, Neil Young es el abuelo del grunge”. Sin embargo, entre Neil Young y Nirvana hubo una generación intermedia de rock alternativo en los ochentas que hizo posible el grunge de Seattle, esta generación intermedia, los padres del grunge son: The Pixies y The Replacements. Para este festival, The Replacements se reencontró después de un largo lapso de no estar reunidos. Al comenzar el concierto, el bajista y el vocalista de la banda se dieron un beso delante de todo el público para sellar el reencuentro. Tocaron Bastards of young y Left of the dial, clásicos de la escena alternativa de los ochentas.
Beck y el electro folk-rock nunca se detiene
Beck se presentó mostrando su nuevo álbum Morning Phase. El proyecto de Beck continúa buscando más caminos de innovación. En el último álbum explora un tempo de extrema lentitud. Sin embargo, en este concierto, Beck tocó todo el repertorio de su carrera. La segunda canción interpretada fue Loser que sin duda es la marca personal de Beck que lo convirtió de músico experimental de los noventas a músico mundial.
Sublime…Lana del Rey ¡Sublime!
Después de ser la portada de la Rolling Stones de julio, Lana ya no puede disimular que el mundo entero ama su música. Sin embargo, ella no puede creer que sea una diva del pop, porque ella es y todavía se comporta como una chica de Brooklyn. En este concierto, Lana vestía un sensual y a la vez elegante vestido y tenía una cruz colgada en su cuello, sabemos que esa cruz no es más que una provocación. Lana comenzó el concierto con Born to die y fue la única artista que se bajó de la tarima del escenario y se acercó al público, permitió que los fans se tomaran selfies con ella, firmó álbumes e incluso un fan le dio un regalo en una bolsita azul que ella recibió y llevó consigo hasta la tarima. ¿Qué regalo le habrá dado este fan?
La descarga de Pearl Jam
Ante una audiencia de 75.000 personas, el domingo 5 de Octubre a las 8:00 pm, Pearl Jam tocó por dos horas y quince minutos y cerró el festival. Eddie Vedder portaba una camiseta del equipo de fútbol americano los Osos de Chicago, parecía un adolescente tal cual como en el álbum Ten de 1991. Durante el concierto, Pearl Jam sorprendió con un cover de Imagine de John Lennon. En la mitad de la presentación, las luces se pusieron tenues y Eddie Vedder sacó una botella de vino, y comenzó a beber y a cantar durante las demás canciones, creando un momento de intimidad con el público, como si todos fuéramos amigos de Eddie desde hace mucho tiempo, y él estuviera tomándose un vino con nosotros. La última canción fue Alive, y fue como si literalmente estuviéramos de nuevo en los noventas, como si por primera vez hubiéramos estado en los noventas, y nada más nos hiciera falta.
Texto Carlos Rodriguez
Fotografía Peter Baker
Esta es la era de Benjamin Booker.
Cuando creíamos que Jack White ya lo había hecho todo, que el blues y el rock no podían llegar aún más alto, surge Benjamin Booker. Nacionalidad: El blues. Sexo: Fender Stratocaster. Si usted se quedó prendido por siempre a White Stripes, cuando digo prendido, me refiero a que usted considera que no se podía avanzar más allá de White Stripes, Benjamin Booker es la guitarra que vuelve a inventarlo todo de nuevo. Parece el hermano de Leny Kravitz pero no lo es. Parece el nieto de Jimmy Hendrix, pero tampoco lo es. En algún lugar del mundo, Jack White lo tiene que estar escuchando y debe estar diciendo: “ ¡Benjamin, pero qué has hecho con la música de White Stripes!”. Durante el concierto, Benjamin Booker estuvo a punto de romper la guitarra con la canción Violent Shiver, pero no lo hizo porque Jimmy Hendrix le dijo que no lo hiciera.
Debemos convertirnos a de Cult
Madelin Follin, cantante de Cult, entregó en el concierto toda la tristeza gótica que hay en su alma. Sin lugar a dudas, el electro rock pop de Cult llevó al público a una oscuridad matizada, una mezcla de alegría y tristeza que nunca termina por definirse, y uno con la música de Cult siente que quiere saltar y bailar pero a la vez deprimirse. Cult tiene un sonido post punk perdido en oscuras influencias de Joy Division, Talking Head y The Cure. Por esta oscuridad, la banda fue convocada para ser parte del soundtrack de la película Carrie (2013) del famoso libro de terror de Stephen King.
El indie pop barroco de St. Vincent
St. Vincent presentó un extraño experimento indie de ensamblaje de rock, jazz, electrónica, por momento con secuencias progresivas e industriales. La banda nos recuerda mucho a The Cardigans pero revolucionada hacia una densidad electrónica y a veces sinfónica. St. Vincent es de Dallas Texas. Annie Clark, la cantante y líder de la banda, estuvo vestida con un traje lleno de monstruos de otro mundo, sin duda fue una de las mejores presentaciones del festival. Verla en vivo es impresionante, ella se mueve como un robot. No parece de este mundo. Es una ciborg-mujer que hace indie pop barroco.
La reinvención post-psicodélica de Temples
De los proyectos extraños de revival que se hayan presentado últimamente, estos chicos de Londres llamados “Temples” están haciendo algo muy original. Ellos toman el rock psicodélico más crudo, más ácido, más trip trip trip de los sesentas para reinventarlo con un sonido contemporáneo. El resultado: escuchar el Pink Floyd de Syd Barrett, el rock The Byrds y The Kinks pero en clave actual. Estos chicos están haciendo un proyecto de ir directamente al corazón de la psicodelia inglesa de los sesenta para mostrar nuevos caminos de revival, reinterpretar influencias y empujarlas hacia un post-psicodélico siglo veintiuno.
El recuentro del pre-grunge con The Replacements
Cuando Kurt Cobain se suicidó en 1994 dejó una carta de despedida en la que aparecía esta frase de Neil Young “es mejor quemarse que apagarse lentamente” inmediatamente después de que todos sus seguidores leímos esto, nos fuimos a buscar la música de Neil Young y declaráramos al unísono: “Si, Neil Young es el abuelo del grunge”. Sin embargo, entre Neil Young y Nirvana hubo una generación intermedia de rock alternativo en los ochentas que hizo posible el grunge de Seattle, esta generación intermedia, los padres del grunge son: The Pixies y The Replacements. Para este festival, The Replacements se reencontró después de un largo lapso de no estar reunidos. Al comenzar el concierto, el bajista y el vocalista de la banda se dieron un beso delante de todo el público para sellar el reencuentro. Tocaron Bastards of young y Left of the dial, clásicos de la escena alternativa de los ochentas.
Beck y el electro folk-rock nunca se detiene
Beck se presentó mostrando su nuevo álbum Morning Phase. El proyecto de Beck continúa buscando más caminos de innovación. En el último álbum explora un tempo de extrema lentitud. Sin embargo, en este concierto, Beck tocó todo el repertorio de su carrera. La segunda canción interpretada fue Loser que sin duda es la marca personal de Beck que lo convirtió de músico experimental de los noventas a músico mundial.
Sublime…Lana del Rey ¡Sublime!
Después de ser la portada de la Rolling Stones de julio, Lana ya no puede disimular que el mundo entero ama su música. Sin embargo, ella no puede creer que sea una diva del pop, porque ella es y todavía se comporta como una chica de Brooklyn. En este concierto, Lana vestía un sensual y a la vez elegante vestido y tenía una cruz colgada en su cuello, sabemos que esa cruz no es más que una provocación. Lana comenzó el concierto con Born to die y fue la única artista que se bajó de la tarima del escenario y se acercó al público, permitió que los fans se tomaran selfies con ella, firmó álbumes e incluso un fan le dio un regalo en una bolsita azul que ella recibió y llevó consigo hasta la tarima. ¿Qué regalo le habrá dado este fan?
La descarga de Pearl Jam
Ante una audiencia de 75.000 personas, el domingo 5 de Octubre a las 8:00 pm, Pearl Jam tocó por dos horas y quince minutos y cerró el festival. Eddie Vedder portaba una camiseta del equipo de fútbol americano los Osos de Chicago, parecía un adolescente tal cual como en el álbum Ten de 1991. Durante el concierto, Pearl Jam sorprendió con un cover de Imagine de John Lennon. En la mitad de la presentación, las luces se pusieron tenues y Eddie Vedder sacó una botella de vino, y comenzó a beber y a cantar durante las demás canciones, creando un momento de intimidad con el público, como si todos fuéramos amigos de Eddie desde hace mucho tiempo, y él estuviera tomándose un vino con nosotros. La última canción fue Alive, y fue como si literalmente estuviéramos de nuevo en los noventas, como si por primera vez hubiéramos estado en los noventas, y nada más nos hiciera falta.
Texto Carlos Rodriguez
Fotografía Peter Baker