Led Zepagain: el mejor tributo a Led Zeppelin del mundo, estuvo en Bogotá

La banda proveniente de los Ángeles que se encuentra cumpliendo 30 años de realizar el que para muchos es el mejor y más grande tributo a Led Zeppelin, se presentó por primera vez y de manera exitosa en la ciudad de Bogotá.

La agrupación que cuenta con el guiño y la bendición de los mismísimos Jimmy Page y Jason Bonham, hijo del desparecido baterista, arribó por primera vez a Colombia con una muy buena acogida y un público que los recibió calurosamente para recordar y revivir por una noche al mítico cuarteto Led Zeppelin, una de las bandas fundamentales y legendarias en la historia del rock and roll.

El Auditorio Lumiere fue el sitio elegido para el show que logró albergar a más de 100 personas que desde las 6:30 pm se empezaron a congregar en el lugar. Cabe destacar que la realización de un espectáculo de esta índole en nuestro país puede llegar a ser compleja, esto en el sentido de que muchas personas se cierran un poco o no ven con buenos ojos este tipo de espectáculos, acuñando a que se trata de “replicas” de otras bandas, sin embargo, así mismo hay un gran número de seguidores que ven justamente en este tipo de shows la oportunidad perfecta para recordar y de una u otra manera “revivir” un poco a su banda favorita, aunque sea por una noche.

Y es que agrupaciones como God Save The Queen, y la misma Led Zepagain, han sido exaltadas en todo el mundo por su excelente trabajo, con el que de una u otra manera contribuyen a mantener viva la esencia de todas esas bandas míticas que ya no existen y así llevarlas o darlas a conocer a las nuevas generaciones.

Fue por ello que a las 8:55 de la noche, el organizador del evento, el señor Carlos Oñoro, tomó la palabra y además de dar la bienvenida a los asistentes, como generalmente acostumbra hacerlo en los eventos que organiza, también hizo una pequeña intervención sobre lo anteriormente mencionado, y a su vez, le dio las gracias a quienes habían cumplido la cita a este evento.

Sin más preámbulos y con una puesta en escena modesta, pero eso si completa, se dio inicio al espectáculo de Swan Montgomery, Anthony David, Jim Wootten y Derek Smith que hacen las veces de Robert Plant, Jimmy Page, John Paul Jones y John Bonham, respectivamente.

La noche iniciaba de la mano del clásico “Rock n’ roll”, inmortalizado por los ingleses en el año de 1971, desde el comienzo se notó una gran precisión en la interpretación de las notas y las melodías y el parecido de la voz de Montgomery con la de Plant llega a un punto en el que verdaderamente asombran.

El repertorio continuo con “Good Times and Bad Times” y prosiguió con “Ramble On”, ambas interpretadas de manera majestuosa por los estadounidenses. En el intermedio de las canciones el vocalista, Swan Montgomery, aprovechó para saludar a los capitalinos y agradecer la asistencia: “Es nuestra primera vez en Bogotá, pero esperamos volver varias veces más”, mencionó el cantante.

Como era de esperarse, todos traían los clásicos atuendos que caracterizaban a los miembros de la banda original, pantalones ajustados y de botas muy anchas, zapatos de plataforma y los diferentes artículos que los identificaban en el escenario tales como el sombrero de pesca de John Bonham, las camisas abiertas y brazaletes de Robert Plant y la camiseta con el símbolo representativo de Page.

La velada siguió con uno de los éxitos más emblemáticos de Zeppelin: Black Dog, aunque desde el principio el público se mostró bastante enérgico, con esta canción definitivamente los ánimos se terminaron de encender en el sitio. Los temas en seguir fueron “The song remains The Same” y “Four Sticks”. Cabe resaltar también, que había personas de todas las edades dentro del público, demostrando así que Led Zeppelin sigue siendo una banda indeleble al paso el tiempo.

Llegaba uno de los momentos más esperados, la interpretación de “Star way to heaven”. Desde el momento en el que , Jim Wootten se sentó frente al sintetizador la audiencia se exalto en júbilo pues este tema ha acompañado e iniciado a generaciones enteras en el mundo del rock n roll, simplemente basta escuchar sus primeras notas para reconocerla de inmediato, tal como sucedió en ese momento en el Lumiere.

Después de dejar “la vara tan alta”, debía seguir un tema igual de épico, por ello la siguiente canción en ser interpretada fue “Kashmir”, otra de las melodías épicas que Zeppelín logró inmortalizar y que hasta el día de hoy difícilmente ha podido ser emulada, aunque Led Zepagain se acerca mucho a ello y eso también es para resaltar.

Seguidamente, Swan se dirigió al público para agradecer la hospitalidad con la que había sido tratada la banda y reiteró que espera poder regresar posteriormente al país.

Sin lugar a dudas hay muchas cosas para destacar de este show, entre ellas la gestualidad de Swan Montgomery, su presencia en el escenario, su feeling, y carisma tanto para interpretar a Plant como para interactuar con el público se convierten en uno de los mayores atributos de la banda, también Derek Smith destaca mucho por su destreza al tocar la batería, sobre el final del show tuvo el momento de presentar su solo y sin duda dejo impresionado a más de un asistente y nos trajo a la mente al gran “Bonzo”.

El concierto concluyó con una mezcla (popurrí) que incluyó los temas “Whole Lotta Love” “Heartbreaker” e “Immigrant Song”, después de ello los músicos se despidieron del público y abandonaron el escenario.

Si el show se pudiera describir en una sola palabra posiblemente esta seria: envolvente, puesto que sin lugar a dudas es un espectáculo que te atrapa desde el momento en el que inicia y te mantiene así hasta el final, si cumplen su promesa de regresar, es una presentación totalmente recomendada, a la que vale la pena asistir ya que de seguro no se arrepentirá.